Cambia, cuando te diste cuenta todo cambio, vos cambiaste, ella cambio, la cama cambio, los besos cambiaron, todo cambia y es inevitable porque así debe ser porque no podes permanecer ajeno a los vaivenes del tiempo, a los vericuetos del corazón  a los sentimientos que se descorchan en cada canción que nos remite a algo, a algo lejano y pasado, a algo que no esta, por eso cambiamos para afrontar la derrota, ser dignos y mirar al frente sin la vergüenza del despechado, del que no puede olvidar, del que perdió y no se atreve a mirar a los ojos del destino. 

Las cartas me lo dijeron pero yo no lo quise ver, porque los cuentos del destino no fueron echos para mi, soy visceral y enigmático  pero muestro la hilacha cada vez que me torean por eso es que me trompeo a menudo contra el espejismo de mis días mas fecundos y mis horas mas animales. Ahora frente al espejo estoy mas tranquilo, mas especulador y menos frontal, me gusta así, esperar agazapado el momento de actuar. Estoy en un buen momento. 

Ahora me cuido un poco mas, de los excesos, del porro, del vino y del amor que me provoca sensaciones descontroladas, porque así es amar, con fuerza y pasión  a todo o nada, aunque sea perderlo todo, pero todo por una causa mas que justa, no quiero caer en frases escuchadas, pero el amor lo mueve todo, y mas cuando llega tan profundo que te estremece y te libera y te vuelve un ser sexual y desenfrenado, ahí es donde somos únicos  sin estructuras ataduras ni mordazas. Que se caguen los gobiernos, la política y cualquier forma de poder, tienen que entender que sin ser realmente libres nada tiene sentido, nada. 

Los Saluda.
P.

No me voy a disculpar porque no me interesa hacerlo, mi ausencia de este blog fue por motivos que aun hoy intento converger en algún tipo de argumento que de por sentada mis ganas de afrontar lo que viene. En fin, la verdad es que me fui de vacaciones y radicalmente después de eso me hice cargo de un par de asuntos que me tienen ocupado al día de hoy. Casi que no pude leer ni una pagina de los casi tres libro que leo en simultaneo, ni hablar de ir al cine, mirar una película o escuchar un disco nuevo (sea cual sea). Pero vuelvo, como vuelve la primavera a mojarnos en este octubre lluvioso sobre Buenos Aires y nos pone inestables, febriles y poco atentos a los florecimientos del amor. Si pregunta, yo estoy bien...un poco tarado cuando no se me dan las cartas como yo quiero pero eso esta bien no siempre se puede caer en los caprichos de quien escribe, ahora soy marido, ahora tengo que dejarme querer y soñar con misteriosas señoras de escamas rubí. Perdón me distraje otra vez pensando en mí, tengo inquietudes de hombre moderno, capataz y dueño de su destino, ese que es gobernado por pasiones divergentes y cientos de lenguas filosas que claman por ser escuchadas. Del otro lado el amor, eso que todos buscamos aun sin quererlo y enloquecemos por encontrarlo. En fin... acá estoy de nuevo, igual que siempre, intentando romper con la estructura a la que nos sometemos cada día.

Los Saluda.

P.

Bandidos.

Imaginamos la tormenta pero el invierno nos tapo, a lo lejos se ve una patrulla que dispara imágenes ajenas a nuestros humores, somos conscientes de que hemos perdido el rumbo pero avanzamos con un impulso difícil de detener y nos vamos haciendo hombres, cada vez mas alejados de la sociabilidad y nos hacemos marginales, opuestos y bandidos. ¿De que hablas cuando decís amor? Estamos perdidos, somos perdedores pero alguien de los dos salió ganando. Te escribo para serte sincero, porque si no digo lo que siento puedo perderme y caer a un vacío que de solo pensarlo estremece. Empiezo a hablar y no paro, no paro. Se desata la verborragia callejera y te expongo mi libreto y mi pasado, ese que me condena y me hace estar arriba de la tormenta, porque ya la vi, ya la pase, una vez y otra, y otra. ¿Estas ahí para decirme cuando parar? A veces confundo emociones, decime hasta donde puedo ir, quizás lleguemos a encontrarnos en algún punto, por ahí alguna vez. 

Estoy de vuelta, seguimos en la tormenta.

Hoy.

Cambio de parecer muy rapido, no porque sea inconsistente, aunque un poco lo soy pero ese no es el punto, la cuestion es que suelo disparar ideas a cada rato y algunas, solo algunas despiertan la chispa necesaria para volverse accionantes. Hace un tiempo quize postergar mis anhelos musicales, dejar todo de lado por miedo a volver a caer en la frustracion y no encontrar lo que realmente estaba buscando, me sumergí en otro mundo, otro escape intentando buscar rutinas que calamar esta ansiedad creadora que tengo a diario. Es verdad, por un momento me senti capaz de ocultar esos deseos, bastante bien me iba. Basto una sola noche, una cancion, un rencuentro, un momento de felicidad y el recuerdo de todo lo vivido para volver a destapar la gran fuente inagotable de deseos que invade mi cabeza y hace bailar a mi corazón. Hoy soy un alma agitada tratando de entender hacia donde ir, que hacer, que decir. De algo estoy seguro, voy a perseguir ese anhelo que alguna vez me mantuvo en vela tantas noches y tantos dias de buscar un sueño. Hoy soy una quinceañiera que todo la sorprende y tiene mil expectativas puestas en un futuro que habra que forjarlo con cada acorde tocado, con cada palabra escrita, gracias por volver a hacerme sentir esta pasion inagotable que despierta en mi los mejores deseos. Hoy puede ser un gran día.

Abrigo y Piel.

Estamos bailando y ella se acerca para hacer tronar mis caderas, regatea y se mueve como un invertebrado  divagando en el océano, intento seguirle el ritmo pero es muy intenso para mis rodillas, rústicas y oxidadas de no haber sido excitadas desde hace tiempo. Se posa en mi buscando algo parecido al néctar, pero no, no puedo llegar a comprender lo que me dice y empieza a moverse salvaje, intentando llamar la atención con sus ampulosos gestos que invitan a arrojarse sobre ella, estoy inquieto, creo que estoy haciendo un papelón y no dejandome llevar como la situación lo pide, me acercan un trago, me quema la garganta y me da coraje, la doy vuelta y le clavo los colmillos al costado del lóbulo inferior, se retuerce pidiendo mas, un poco mas, la música suena fuerte, no entiendo lo que cantan pero suenan tambores y se enciente un ritual, todos bailan alrededor formando un circulo grande, muy grande, en el centro de la escena hay dos personas encadenadas a sus caderas, intento achinar los ojos para ver quienes son, no logro darme cuenta, me acerco un poco mas pero unas personas de traje oscuro me alejan de la escena, me llevan para atrás y me largan en un callejón, esta vacío y oscuro, no hay nadie; a lo lejos se aproxima una luz, brillante y luminosa, me acerco de a pasitos, sin apurarme, un poco por el miedo otro por la intoxicación que llevo dentro, estoy cerca, veo la luz, veo la calle, un auto me pasa por encima y quedo mirando el cielo de noche sin poder moverme, las piernas no me responden y siento sangre en la boca, me cuesta respirar y hace frío, mucho frío...

Rojoy Negro.

El retorno a las fuentes, algo así como buscar adentro de uno las "bases y puntos de partida" para acabar con la capacidad de autodestrucción. Soy cotidiano y espontáneo, pero carezco de autocontrol ante ciertas situaciones, provocativa y especuladora juega conmigo dejándome al descubierto, porque soy blando, la carne es blanda y la sangre tira, con fuerza e intensidad. Decime, sos tan pasional como yo o solo estamos jugando a ser héroes? Entreno, el cuerpo para calmar el alma, que ruge, ruge tanto que me atora las ideas y escupe todo lo que puede, que soy raro, que soy paranoico, que tengo complejos obsesivos, eso y mucho mas. Perdón, me distraje hablando de mi, vos que contas? Avisame si queres, podemos tomarnos una copa, pero solo una porque después me pongo atrevido y empiezo a contar las horas que me sostengo de pie, suelo terminar las noches antes de empezarlas, por miedo a desbocarme, otra vez. Estoy siendo sincero, tengo miedo, donde se compra la valentía para ser feliz? Preguntémosle a los tontos del pueblo, ellos tienen la receta justa para que todo les chupe un huevo. Acartonado, es de cartón porque no se conmueve y usa a los que rodean, lacra, rata y ocupa, sos cualquiera. Una noche, de tequila me dijo un montón de secretos, después se los olvido, ahora pasa las horas intentando recordar quien era, en eso estamos juntos yo intento reencontrarme con algo que alguna vez quise ser. Guardo mis mejores frases para cuando la revolución este en marcha, por ahora espero atento, agazapo y febril, dotado de carisma y contradictoria paz, por dentro soy caótico, pero tengo claro las ideas que surgen, todo el tiempo quiero ser mejor, mucho mejor. 

Pat.

En los cuadernos de ayer era una persona normal, atenta y adepta a los caprichos de su peronsalidad. La verdad sea dicha, la amistad es una puta mentira cuando del otro lado los que dicen ser tal son una desgracia egoísta y te sumergen en su mundo, chupandote y después dejandote solo, en la nada y sin importarles un carajo lo que sea de vos. A estos personajes ya los deteste una vez, hoy vuelvo con mas odio que nunca a la carga contra los que queriendo y consciente de serlo se jactaron una vez mas de su hipocresía y continúan en esa senda. Cuando la traición acude ya no queda nada mas que decir, todavía sus palabras me retumban en algún lugar de la mente, repitiendose cada vez que los caballos se vuelven a juntar, queriendo apuntalar una historia que no les pertenece, o será que a mi no me pertenece y nunca me perteneció? Sea como fuera algún día les voy a decir todo lo que pienso y si puedo les voy a patear la cabeza. Yo tengo la cabeza fría, el corazón caliente y muchas ganas de mandarlos a todos al carajo y decirles por primera y ultima vez que se pueden tirar bajo un puente, mientras la hipocresía sigue siendo su mas fiel discurso, y uno en particular mas que los otros. CHUPENMEUNHUEVO.

Entreacto.

"Entonces no dijo nada, dio media vuelta, se sonrió al voltearse y siguió su rumbo que la llevaba lejos de mi. Durante 2 años no supe nada de ella, a pesar de compartir la misma ciudad no tuve noticias sobre su paradero ni su estado sentimental. Mientras tanto empecé a salir con algunas amigas de mi época del colegio, nada formal, un par de noches de compañía que servian de excusa para destapar unas cuantas botellas de vino y no terminar abrazado a la nada idealizando con volver a sentir un poco del calor que nos da el fuego del amor pasional. Los inviernos fueron largos y las horas de oscuridad me dejaban un sentimiento de angustia que solo podía suplantarse por momentos de risa estupida provocada por el humo de algunas tucas, esas que raspan la garganta y te dejan una sensación de picazón en el pecho. Así y todo fuimos perfectos navegantes de la ciudad, a veces no recordaba hace cuantos días que estaba despierto, visitando fraternidades que abrazaran mi pesar y alivianaran el impacto. La seguía, de a ratos entre sueños y humores etílicos que depositaban toda su elegancia en las sabanas de alguna visitante de ocasión, me humillaba, pero era efectivo recordarla cada vez que se terminaba el acto, y así volvíamos una que otra vez a encontrarnos y darnos aliento, amor y esperanza..."

Otoño, madera.

Este otoño trae una oleada de melancolía que me atraviesa cada vez que logro respirar profundo, cada vez que el pastoso y húmedo ambiente de la ciudad me penetra en la sangre y me hace recordar porque estoy acá, porque soy como soy y porque mi vida es una sinfonía de aciertos y errores constantes que intentan convivir para encontrar un poco de armonía entre tanto caos. Hay canciones que me recuerdan otras épocas, ni mejores ni peores, solo diferentes, recién teníamos 20 años y la esperanza de cambiar el mundo era un ideal realizable y con frecuencia rozamos la "revolución". Yo tan rebelde, vos tan centrada, así nunca íbamos a funcionar, lo escribimos en los cuadernos de ayer y aun hoy se repite la historia, yo tan mejorado, vos tan descontracturada. Ya no están los mismos amigos que hace años atrás, los tiempos cambian y como siempre las personas optan por otros caminos, ni mejores ni peores, solo diferentes y en esa bifurcación de los rumbos te perdimos, o me perdieron o simplemente nos dejamos de ver porque ya no había nada mas que hablar, nos despedimos sin mirarnos a los ojos y ya no hubo mucho mas para decirnos, el tiempo hizo el resto y ya no nos reconocemos en la multitud, perdura tal vez, el recuerdo del tiempo compartido pero nada mas, vos viajas, yo trato de vivir mi vida, disculpame si no soy un santo pero esta mañana de otoño me tiene cono alergia en los ojos y parece que se esta acostumbrando, no lloren por mi para entonces yo ya voy a estar muerto... al menos para ustedes.

Heroin.

De fondo suena una canción de Lou Reed, el cuadro se compone de manera natural, cuando hay movilidad en el destino yo aprovecho y saco a relucir mi mejor versión, esa que conjuga espontaneidad y compromiso afectivo, las ideas se deslizan como trineos a la deriva y se asocian buscando su mejor versión, no soy bohemio pero me gusta la libertad, soy espontaneo pero sufro las estructuras de la mente, todo esta tan perfectamente alineado que no puedo dejar de romper los esquemas a cada rato; en el amor soy gigante, gigante de corazón porque el amor es sin fronteras, y así debería ser el mundo, mirar mas alla de las fronteras y admirar el horizonte sin pensar en limites, pero claro siempre esta el problema racial de los diferentes, de los que se sienten menos, de los que están atados a los aranceles de los que tienen mas porque son menos; En utopia no hay ataduras lingüísticas, el lenguaje es libre y la interpretación surge del propio sujeto en acción; los libros son hermosos pero nos engañan en su interpretación de la realidad, ojos abiertos y destreza critica para saber que elegimos, igual cualquier acto espontáneo que derive del arte es belleza, por lo menos desde donde lo percibo yo. El manifiesto al que respondo solo sirve si no hay que convencer a nadie, ahí es donde nunca vamos a estar equivocados, en la libre elección de las ideas secundada por nuestras acciones, soy despierto pero siempre vuelvo a utopia, a buscarla para sentirme esperanzado otra vez. Lo demás es pura casualidad, a fin de cuentas es Domingo y todo puede pasar, aun si son las siete treinta de la tarde, noche.

Lou Reed & The Velvet Underground, buen domingo.

Muchacha Magnetica.

En un recuerdo, antiguo, lejano y caótico la muchacha magnética se esgrime ante las fuerzas del olvido tratando de conservar todo su eclecticismo que la hace tan natural, tan caprichosa a los arrebatos de un corazón que trata de establecerse y abandonar la nocturnidad de los hechos. Acaso convertidos en caretas dejamos atrás viejos rencores y nos jugamos a todo, a no ser discretos y mostrarle al puto mundo que nos hace tan increíblemente apuestos y opuestos, y bebemos el jugo diario, brindamos con vino y nos revolcamos en un manantial rodeados de extraños que usan sus ojos para comernos, para celarnos; y fumamos, y nos reímos a carcajadas para que se te vaya la inseguridad y después todo es una autopista de placer, caótico y desprovisto de reglas y estructuras poéticas, y ahí somos la perfección en el caos, en la mayor tormenta del siglo y acabamos extasiados, y solo habíamos ido hasta el Sur de la ciudad.

Yo no soy un santo, no.

¿Que nos hace tan inmensos?

Nada, somos partículas esparciendose por el espacio y colisionando nuestros impulsos tratando de sobrevevir a los arrebatos nocturnos del amor. Mucho amor, eso es lo que tengo para darte, pero primero busco la sangre, la sangre del cuerpo que nos corroe y nos hace pecadores y mundanos, ahí donde escribimos nuestros nombres en la piel para tratar de alcanzar un poco de la eternidad. Somos intentos clandestinos de un juego de azar, viajo, trato de ver la luz mas alla del humo del faso que nos rodea, amor no sientas pena por mi, estoy rodeado de afectos, buen viaje.

Ella también.

Los últimos tres días fueron de los mas extraños, después de salir de un virus que me dejo una semana en cama encontré una nueva sintonía con viejos anhelos e inquietudes que se presentaron para despertarme y movilizarme las ideas, otra vez. No se que fue, porque y como paso, pero me me entro primero por la emoción y después por la música en si una canción de Spinetta que me tiene tarado hace 3 dias. No puedo dejar de escucharla, tocarla, tararearla cada vez que estoy solo, nunca fui seguidor de ningún Spinetta, ni del solista ni del de Almendra ni del de las Bandas eternas y tampoco del de pescado, si bien valoro su obra y conozco gran parte siempre hubo otras cosas que me conmovieron mas. Bueno, pero todo cambio hace tan solo 72 hs, no puedo sacarme esa melodía de la cabeza ni de cada cm de mi humanidad. Hay veces que quisiera irme lejos, bien lejos, mirar la inmensidad, alejarme por un rato de mis ideas y miedos y dejarme ser, por una vez mas, no pensar en nadie mas, en nada que me perturbe, nada que no sea para mi, pero claro eso es imposible, siempre estoy primero para los demás, después y ultimo para mi si es que queda tiempo y ganas, sino nos vamos a dormir a las 8 pm, porque el cansancio del mundo me pide parar. Prefiero fumar y dejarme llevar, tomarme una cerveza y que la tarde se muera de a ratitos, despacio con calma, sin apurarme el vaso y la calma. Que hace falta para que no me den la espalda? o sera que yo tengo que darle la espalda a todos y ser egoísta, pero de verdad no como dicen que soy y es mentira. No se, ahora solo se me viene a la cabeza una idea...

"Ella también se canso de este sol, viene a mojarse los pies a la luna".

Pat.

Pensaba.

Hay veces que el día nos propone un giro inesperado, ganas de cambiar y de seguir. No somos valientes ni osados por atrevernos al cambio, es lo que debe ser, los que hablan de estabilidad y constancia es porque no entienden nada de aventuras y nunca leyeron a Julio Verne. No podria percibir la vida como algo lineal, necesitamos de esos sobresaltos y giros que ponen las ideas a girar y nos dejan con una fantasía de volver a empezar, de nuevo otra vez, y así nos vamos repensando cada vez que agotamos los espacios y necesitamos salir, salir del lugar, del ambiente, de la ciudad.

En mente tengo muchas ideas, pero primero quiero vacaciones.

Los Saluda.

Pat.

Permiso para objetar, si claro este espacio es libre y puede usted decir lo que quiera; Bien, me parece usted un pobre hombre, sin criterio ni lógica hagase ver que le va a venir bien; Tiene usted razón, disculpe las molestias ocasionadas, tratare de mejorar de aquí en adelante; Hagase usted responsable de su obra, lo demás tiene arreglo, hasta luego; Hasta luego señor.

Y así sigue la vida, en un constante interrogatorio con nuestra moral y forma de entender o no el mundo.

Merci.

Marzo debería ser el principio de todo, digo debería porque en mis expectativas no lo es, es mas bien una seguidilla de subidas, bajadas, subidas y bajadas, picos y descensos bastantes bruscos sin encontrar estabilidad en ningún plano posible. No es heroico es sobrevivir a la intensidad que elegimos, o tal vez no la elegimos pero si la llevamos adelante comandados por los arquetipos de algunos caprichos que nos pueden costar la sanidad espiritual, aunque de todas formas sabemos que deje de prestarle atención a los desbarajustes del alma el día que me dijo que no, ahora poco me importa aparentar ser normal, porque no hay normal ni standares, combato todo lo que sea módico y basico. Cuando subo estoy que vuelo, cuando caigo me desbarranco sin posibilidad alguna de frenar, solo el impacto disminuye cuando amortiguamos la caída con la fumata cotidiana, o la corrida que oxigena la sangre, lo demás es perdición en el sentido mas literal de la palabra. Perdidos, estamos perdidos pero en silencio encontramos algo que nos conmueve y perturba, nos hace antagónicos y espejos de nuestra fatalidad, no es que seamos incompatibles es que me cuesta asimilar el cambio, debería dormir un año para poder entender de que va la vigilia pero no logro descansar hace un siglo, es el karma de vivir intentando comprender nuestra propia psiquis, debería ahogarme un poco mas en el inframundo de ellas, solo por un rato para saber que se siente una vez mas, mientras tanto espero que venga el frío para recordarme como era la muerte.

Debería dejar de intentarlo, no vale la pena.

P.

Formas de llover.

Abro la ventana, la humedad se trepa hasta casi mil porciento, el dia es terriblemente pegajoso, tanto que si nos enroscarnos nos asquearíamos hasta quedar satisfechos y después deseariamos salir corriendo, pero no por nuestros humores sino por el miedo de afrontar el presente, no te tengo miedo pero me podes lastimar, son cosas diferentes pero que me conmueven lo mismo, lejos o cerca es lo mismo, el sentimiento no cambia y mientras no borremos las marcas de antes de ayer todo va a seguir igual, perfecto y complicado, es algo incomprensible pero hermoso, no lo sabes ahora, pero en el fondo lo estas sintiendo. Llueve, pienso en algo que me desconcierta y me pone a tono con las impericias de un tonto mojado y aburrido, a veces te confunde tanta dulzura pero es que el corazón tira mas, mucho mas que las afrentas por las palabras atragantadas de antes, ahora soy mejor, a veces me pierdo pero soy mucho mejor, y mientras el cuarteto sigue jactandose de conocer mi destino yo sigo escribiendo mi propia anarquía, gracias por dejarme ser, de todas formas nos quedan un par de rounds mas para dejar de escupir sangre, antes de que termine el año nos vamos a volver a encontrar y no voy a ser yo quien tropiece primero, estoy mucho mas confiado y con palabras sabias que aprendí a los golpes en la calle, algunas noches desparejas y volteado, por lo menos no me escondo y doy la cara, a veces solo quiero irme lejos, bien lejos.

Que esta lluvia barra con todo lo que de vos me provoca malestar, no te olvido, pero no tenemos nada que ver.

Hasta mañana.

P.

El viejo de arriba.

Hay cosas que simplemente no se pueden comprobar o no tienen explicación alguna, es cierto, pero también lo es que a veces el destino (dios?) obra de manera misteriosa dandonos una sacudida y poniendonos de nuevo en nuestro lugar y demostrandonos porque es tan sabio.

El relato empieza con un Lunes x de febrero de este 2012, tarde lluviosa de un feriado sin precedentes, después de haber agotado todas las instancias de reviente los días previos había que humedecer la piel con un poco de ritmo y humos porteños. De camino al abasto el cielo gris demostró que el pronostico de lluvias era cierto y el chaparrón empezo lentamente a golpear contra el bólido rojo que nos transportaba a toda velocidad por la ciudad. Esquivamos los controles porque cada tanto le entrábamos a un trago para ir aflojando la garganta y sacudirnos con historias de lima en llamas.

Llegamos con la puntualidad de un suizo, pero antes a comprar un atado para los tabaqueros de siempre, en el mostrador una señora atendía con un delantal que parecía de maestra de jardín, me pareció simpático, muy simpatico. Entramos, llovía, vamos a comprar una birra, pero antes a desagotar el meo porque sino hace mal a los riñones, después 2 entre 3 y las dividimos en 3 vasos grandes, en partes iguales para ser demócratas progres e igualitarios, dale.

De fondo retumban golpes de tambor y bombos que molestan porque están muy cerca, nos alejamos a la parte descubierta, aunque llueve el agua no nos toca, somos inmunes e impermeables, por lo menos por un rato mientras el porro se consume y nos invade los pulmones y nos quema la cabeza, y empezamos a subir, en cada pitada lentamente, un poco mas, y entonces necesito otro trago porque se me seca la garganta o porque el vaso esta pinchado, tomo rápido, tomo demas. A los 3 nos molesta que se acerquen haciendo "amistad" cualquier vaguito o gatita que quiera pedirte un fumo, un trago o un "algo", no, flaco flaca no somos amigos, y tu pose de querer conquistarme no me convence, me molesta que quieras pedirme algo seduciendome pensando que con eso voy a caer, no. A los 3 no nos molesta que vengan y pidan por favor, o traten de no ser cautivantes porque quieren de vos algo, y ese algo claro no sos vos, si sos buena onda se nota si no andate a volar. Otra ronda, yo pague las primeras así que solo las busco, llueve, llueve mas, el patio se llena de charcos que molestan donde uno pisa, hay que buscar los lugares mas secos, no los que tienen desniveles que se llenan de agua que se cuela por las endijas, las gotas son muy grotescas, cada tanto para. Se acercan dos personas, hablan un inglés poco frecuente, son de Sidney, hablan mas rápido que lo normal, uno de nosotros habla bastante fluido, puede ser por el viaje o por el despiste, hablamos de lugares, viajes, casas, personas, apariencias, una es rubia la otra es castaña, tienen 19 años, hablamos fluido, fue un buen momento, Hey, do you want to smoke? Si responden, gracias, al rato se alejan a seguir conociendo Buenos Aires, seguimos con nuestras rondas pero con la certeza de que el destino (dios?) nos puso un ejemplo real para ejemplificar nuestra teoría, si lo hizo, o por lo menos así lo creímos nosotros, por lo menos así lo creímos en ese momento, fue preciso, ahora solo habrá que esperar hasta la próxima vez que quiera demostrarnos que nuestra teoría es cierta, o tal vez no haya otra próxima vez pero al menos sabemos que ya lo vimos, o tal vez fue un acierto de nuestro caos de humo y birra, o tal vez el destino si obra de formas misteriosas, no lo sabremos... por ahora.

Susurrando al oído puedo llegarte al alma, vos también.

Pat.

Going down to...

Le damos vueltas al asunto pero no hay lógica, nos desbarrancamos otra vez, viviendo como podemos pero sacando provecho de las ventajas de una sociedad que se cae a pedazos. Hace tiempo que le perdí la fe a la humanidad, por eso la cura la encontré en las porquerías diarias que nos metemos, para descordinarnos un poco y entender que no todo puede ser explicado lógicamente, como porque lo aviones vuelan, no entiendo, bichos raros que van de un lugar a otro, yo los veo y tengo la ansiosa sensación de que que en cualquier momento se vienen a pique, pum, y chau historia. Me levanto de un salto cuando el trafico aéreo que pasa por casa me despabila con la turbina de un avión volando cerquita, no se, será que todavía no entendi alguno de mis pasados mortales y estoy tratando de concentrarme en no caerme muerto por falta de concentracion. Avisenme cuando me vengan a buscar que tengo que preparar la mesa, el pan y el vino. Necesito irme, por un tiempo de la ciudad, viajar lejos, estoy empezando a odiar inmensamente a Buenos Aires y temo que si no me voy ya este sentimiento se materialice para siempre, y no esta bueno porque adoro Buenos Aires, pero hay veces simplemente que no la puedo soportar, me sobrepasa de mambo, de mucho mambo. Ultimamente me paso ella, que conducta tan extraña, yo no buscaba nada personal, y ahí se confundió todo, y otra vez lo mismo de siempre, estoy confundido, antes no existía y ahora soy eso, no se, permitanme dudar de lo que me confronta, no soy bueno para las despedidas pero mucho menos lo soy para los reencuentros.

Agitando, agitando me venis a buscar y eso me provoca sentimientos encontrados, no me provoques porque ya conocemos el final. Narices blancas, muy blancas y respingadas.

Sera cuestión de hacerlo a escondidas, te mando un abrazo.

Pat.

No creo en asuntos pendientes, pero tengo pendiente decirte tantas cosas, algún día, tal vez, algun día sabrás lo que tengo para decirte.

Hasta entonces, que sea lo mejor para los dos.

P.

No había forma de comprobar lo que habíamos soñado, pero sabíamos que el lugar habia sido habitado por nuestras presencias, desolados, románticos, dos criaturas tratando de saberse mutuamente, después prendió un porro, contuvo la respiración y me lo paso, lo ojos se me llenaron de recuerdos, de hermosos recuerdos del día que la vi irse con el, me miro y me dijo, no te preocupes estoy acá con vos, eso es lo que importa, me sonrío y entendí que ya no había nada mas entre los dos, nos quedamos acostados en el piso rasposo cubiertos por una sabana blanca, la noche se presento y nos batió a un descanso reparador, al despertar ella no estaba, me quede mirando por la ventana un rayo de luz que intentaba colarse al interior de la habitación, eran las 9, todavía lo son…

P.

La chica de al lado.

Alguna día, cuando todo esto pase, vas a entender que todo lo que dije siempre fue verdad, corazón, no hay rencores, solo amor y ganas de romperse las caderas enroscados en sabanas de colores desteñidos por el derroche de noche y fantasía, amor, es algo de todo eso y algo de esto, el deseo de seguir acalorandonos a escondidas, en los pasajes mas oscuro para no ser vistos porque es complicado, pero es la llama que perdura, mientras siga vivo, soy todo amor, soy todo sentimiento por eso me descalabro cuando salta la ficha, salgo a aguantar y ahí estropeo todo, otra vez, me encanta serte fiel, destreza aplicada al posmodernismo de hoy, dos pesos, nadie da dos pesos por eso, y yo en cambio te doy todo, a cambio solo te pido revancha.

Revolcandonos, amor.

P.

Bienestar.

No es algo que quiera comprender, porque nunca me intereso entender por donde pasan mis ideas y mucho menos a donde derivan mis acciones, pero cuando una sensación de bienestar se apodera de mi nada mas importa, podría irse todo a la mierda que no me importaría en lo mas mínimo, si soy egoísta pero poco tengo que arrepentirme de eso, tanto le di a tantos que después se jugaron para el enemigo que ahora me la banco solo, con todo el peso de mis encargos a cuesta... igual estoy mintiendo soy demasiado paranoico para creer que si algo pasara yo no me preocuparía, tengo los sensores hiperactivados, igual últimamente estoy mucho mejor, ya no me viajo en malos trances, derivo mis porquerías hacia algún otro particular que no reclame nada a cambio. Por lo demás, los compañeros siguen en el mismo lugar, los que se fueron, los que están y los que aguantamos los golpes de los que se creen buenos pero solo tienen malas intenciones o son manipulados por sus cariñitos, que desgracia. Igual a todos les deseo el bien, tuvimos buenos momentos, en cuanto a ella, ya sabe todo no hace falta que exponga lo que pienso.

Cuando llegue el momento voy a estar preparado, hasta entonces Bienestar.

Los Saluda.

Pat.

Fallen.

Te debo un ultimo beso le susurro al oído, luego se durmió y esperó encontrarla para abrazarla una vez mas. Al día siguiente no despertó, su cuerpo dormido en profundidad descansaba ahora para siempre, la habitación se lleno de silencio. A lo lejos el caminaba por los andamios de los recuerdos, buscandola, aun con la esperanza de volverá a ver.